Hoy se celebra el movimiento mundial #UnDíaParaDar o también conocido como el #GivingTuesday, que en lo personal creo que debemos de fomentar diariamente, sin embargo ante la situación que estamos viviendo creo que es de mayor importancia hacer eco a esta llamada de dar y brindar generosidad a los demás.
Y es que no se necesita mucho para lograrlo, todos podemos aportar un poco a alguien que realmente lo necesita, ahora estamos muchos de nosotros sometidos a una cantidad de estrés y miedo, así que nosotros podemos ayudar a las personas que lo necesitan a través de unas palabras de aliento, un buen consejo, una videollamada, una carta, un detalle que alegre su día y los aleje un poco de un sentimiento de soledad o tristeza.
Cada uno desde nuestros hogares podemos ayudar, no es necesario salir, simplemente se requiere ser generoso y solidario con los más cercanos.
Podemos asomarnos y ver si mi vecino necesita algo, desde la distancia desearle un buen día, podemos dedicar un poco de tiempo y realizar alguna llamada telefónica a un familiar que sabemos se encuentra lejos y que tal vez más que nunca necesita sentir el amor de los suyos.
Podemos hoy ofrecerle un poco de agua a los servidores públicos que no han parado de laborar, podemos comprarle a ese vendedor que viene diariamente cerca de la casa y darles un poco más de lo que cuesta su producto o servicio.
Se puede dejar un poco de alimento y agua a los animales de la calle que hoy más que nunca necesitan de nuestro buen corazón y buenas acciones.
Si está en tus posibilidades puedes realizar alguna donación monetaria o en especie a los albergues y asociaciones de animales, a los asilos, a la casa hogar, a alguna persona sin hogar, donando equipo de protección a los centros de salud.
Podemos hacer una limpieza a la casa y sacar cosas en buen estado y colocarlas afuera de la casa para gente que lo requiera.
Y es aquí donde me gustaría mencionar algunas de las acciones solidarias que se han dado a conocer y que van de la mano con la solidaridad y generosidad que debería de estar presente siempre.
Hay que aplaudirle a todas las personas que han tomado la iniciativa de alimentar a personas sin hogar y animales callejeros, a los que han comprado despensa para regalar, a las maestras que al saber que sus alumnos no tienen los recursos en los hogares hicieron hasta lo imposible para llevarle el material educativo, a todos los policías que han animado a los médicos de los hospitales con canciones o sirenas para que les den ánimo de seguir adelante.
A esos vecinos del predio que se juntaron para comprarle un pastel de cumpleaños a un adulto mayor, a esos otros vecinos que le colocan notas de agradecimiento al personal hospitalario, a aquél otro que hace malabares para alimentar a los animales de su vecino enfermo, a todos esos músicos que han animado las noches de su colonia.
Son todas esas hermosas y grandes acciones de generosidad que han dado fuerza y esperanza; son esas muestras de amor que nos alimentan el alma y nos hace ver que realmente somos más los buenos, que una pandemía puede sacar lo mejor de nosotros mismos y nos vuelve más humanos y solidarios con los demás.
Ojalá no se requiera repetir este evento para continuar con esas obras de amor y labor social, que se convierta en parte de nosotros y que como ahora esta generosidad que hoy el mundo comparte prevalezca siempre.
Te invito hoy que reflexiones un poco sobre como puedes tú aprovechar este día para dar y darte la oportunidad de ser parte del grupo de personas que hoy son agentes de cambio y luchemos por un mundo mejor, más justo y más humano para ti, para mí y para todos.
