Hoy como cualquier otro día, nos levantamos muy temprano, mientras mamá preparaba de desayunar y mi almuerzo para llevar al colegio, papá me recordaba de llevar todas mis pertenencias y de apurarme para que no se nos fuera hacer más tarde.
Los tres compartimos el viaje en el carro, los miraba desde el asiento trasero, estábamos contentos; al llegar al colegio me apresure en bajar no sin antes decirles un te quiero, sin que me vieran los demás compañeros los bese y abrace y salí corriendo.
La mañana transcurrió como cualquier otro día, sin embargo eso cambiaría en tan sólo un momento; de la nada la tierra comenzó a moverse de manera brusca, tratamos de salir huyendo, pero no me dio tiempo, el techo se desplomó y quede dentro.
En estos momentos solamente pensaba en ustedes, en lo mucho que los quiero y en las pocas veces que les dije "lo siento" y lo mucho que me falto demostrar mi agradecimiento; quiero que sepan que en esos últimos momentos ustedes fueron mi fuerza y mi sustento.
Ahora ya no serán ustedes quien me esperen, ahora me toca a mi hacerlo; con lágrimas en los ojos pedía más tiempo, necesitaba decirles lo mucho que los quiero, pero ya había llegado mi momento.
Mamá, quiero que sepas que te agradezco cada instante que estuviste conmigo, desde que estaba dentro de ti siempre me cuidaste y me abrazabas con gran intensidad, ahora lo entiendo, esa manera tuya de amar, tan incondicional, tan única, tan especial, se que cada palabra que salía de tu boca, cada consejo, cada acción era con amor y con la única intención de hacer de mi una persona de bien.
Papá, se que el tiempo que me dedicaste fue único y especial, gracias por las enseñanzas, por tus brazos, por cuidar de mi, por demostrarme el valor de las personas, por impulsarme a ser mejor cada día, por cada instante compartido aunque siempre me dijiste que querías dedicarme más tiempo el que me diste fue el correcto.
Ambos han sido los mejores padres que la vida pudo haberme dado, no se los dije lo suficiente, pero los amo con toda el alma y con todo mi ser, con todo mi corazón y no hay palabras que sean suficientes para describir lo mucho que les agradezco.
Mamá no culpes al destino que nos haya separado y papá te pido ahora más que nunca que no te alejes de mamá, ella te necesita, juntos saldrán adelante, se que mi partida duele y que es un dolor que no pasará, estará con ustedes por siempre.
Pero quiero que recuerden, que aunque ya no este presente nunca los abandonaré. ahora seré yo quien los cuide, tal y como lo hicieron ustedes cuando era más pequeño. ahora seré yo quien los abrace por las noche y los llene de besos acompañándolos y velando sus sueños.
Les pido que no por esto pierdan la fe, no por mi partida se culpen y se enojen, mi tiempo con ustedes fue perfecto y quiero que así permanezca, mantengan siempre los lindos recuerdos, no permitan que el dolor les quite las ganas de reír y seguir viviendo, recuerden que siempre fueron y seguirán siendo mi ejemplo.
Tal vez mi cuerpo ya no los acompañe por un momento, pero yo sigo aquí con ustedes y seguiré por siempre, no tengan miedo de mencionar mi nombre, no teman el recordarme y sonreir al pensar en todos los bellos momentos de alegría que pasamos juntos.
Permítanse llorar y ser el hombro de cada uno de ustedes, no descuiden a mi hermano ni se dejen vencer, no permitan que mi partida rompa con ese gran amor que nos caracteriza como familia.
Piensen que ahora mi cuerpo no siente dolor, que ahora me encuentro mejor, que soy libre, que me encuentro bien y en paz.
No vean mi partida como un adiós, solamente me alejaré de ustedes por un breve momento, verán que en un tiempo nos volveremos a encontrar, en un mejor lugar, en donde no habrá nada que nos separe jamás, tengan la esperanza de volvernos a ver y que esto sea ahora su motivación para seguir adelante.
Nunca olviden lo mucho que los amo y cada vez que piensen en mi ahí estaré a su lado.
Los ama inmensamente,
Su hij@
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