Hoy celebramos la tenacidad y la persistencia de los jóvenes como agentes mundiales de cambio, quiénes con su entusiasmo e ímpetu han defendido sus ideales y propuestas, las cuales me gustaría reconocer algunas que considero son de gran impacto tanto social como ambiental y en este día son dignas de nuestra admiración y respeto.
Autumn Peltier, es una joven canadiense que pertenece al Clan Eagle Anishinaabekwe de la Primera Nación Wiikwemkoong en el norte de Ontario; con tan solo 15 años de edad ha logrado convertirse en una "guerrera del agua" su lucha inició a los 8 años de edad cuando supo sobre las comunidades de las naciones originarias que no podían beber agua debido a la contaminación de la actividad industrial y de los oleoductos y desde entonces empezó a involucrarse en el asunto; para el año 2019 es nombrada comisionada principal del agua por la nación Anishinabek, representando a 40 naciones originarias de Ontario, muchas de las cuales carecen de agua potable. Como parte de sus actividades, visita las reservas, se reúne con los líderes de la nación Anishinabek y habla internacionalmente sobre los derechos indígenas y del agua.
Ayakha Melithafa, con tan solo 17 años es una activista que vive en la aldea de Eerste River, en las afueras de Ciudad del Cabo en Sudáfrica, a través del trabajo de su madre como agricultora en el Cabo Occidental ha visto como las sequías y la grave escasez de agua han amenazado su medio de vida, lo cual la motivaron a tomar cartas en el asunto formando parte de la Alianza Africana para el Clima y la iniciativa Proyecto 90 para 2030, la cual tiene como finalidad buscar apoyo para el desarrollo promoviendo las bajas emisiones de carbono y una transición energética justa en su país. Durante el 2019, ella y otros 15 niñas y niños de todo el mundo presentaron una petición al Comité de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas para que cinco de las principales potencias económicas del mundo se responsabilicen de la inacción ante la crisis climática.
Cruz Erdmann, con tan solo 14 años de edad este joven ha cautivado a muchos amantes de la fotografía, el año pasado su fotografía nocturna de un calamar de arrecife de Bigfin le valió el prestigioso título de Joven Fotógrafo de Vida Silvestre del Año del Museo de Historia Natural de Londres, ese amor y pasión por el buceo le fue inculcado por sus padres ya que son conservadores marinos lo cual le ha permitido poder pasar mucho tiempo en el océano, a través de su lente ha registrado innumerables tomas que valen la pena disfrutar.
Fionn Ferreira, a sus 18 años ha pasado gran parte de su infancia creando proyectos de ciencia y remando por las costas de Irlanda en su kayak; su pasión por la naturaleza lo llevó a actuar para mitigar los efectos de la contaminación causada por los microplásticos en el medio ambiente; inventó un nuevo método de extracción de microplásticos del agua utilizando su propia versión de ferrofluido (un líquido desarrollado por la NASA) e introdujo el concepto en la Feria de Ciencias de Google en 2019, donde ganó el concurso por su metodología innovadora y revolucionaria.
Greta Thunberg, a sus 17 años de edad ha sido ejemplo para muchos niños y jóvenes, busca fomentar conciencia sobre el cambio climático y la importancia de cambiar los hábitos para reducir la huella de carbono, desde el 2018 ha protestado frente al parlamento sueco durante el horario escolar con un cartel pintado con las palabras "Skolstrejk for Klimatet" ("Huelga escolar por el clima") y así continúa todos los viernes, ha sido inspiración para otros movimientos similares.
Melati Wijsen, tiene 19 años, creció en la isla de Bali, donde se encontró con la epidemia del plástico, un día nadando en el mar salió del océano con una bolsa de plástico alrededor del brazo. Inspirada por una lección escolar sobre líderes mundiales influyentes, fundó "Bye Bye Plastic Bags" y junto a su hermana menor organizan peticiones, campañas de concientización y limpiezas masivas de playas. Desde entonces, Bali ha anunciado una ley que prohíbe el plástico de un solo uso, gracias en parte a los esfuerzos de ambas; formaron parte de los Adolescentes más influyentes de la revista TIME y de las Young Wonders de la CNN en 2018.
Mohamad Al Jounde, joven sirio de 18 años, tuvo que huir a Líbano cuando la vida en su país se volvió demasiado peligros, como muchos refugiados no pudo ir a la escuela, de manera que se propuso apoyar a quienes se encontraban en la misma situación y junto a su familia y con tan solo 12 años de edad, construyó una escuela en un campamento de refugiados donde 200 niñas y niños pueden ahora ejercer su derecho a la educación. Actualmente ayuda a niñas y niños a curarse, a aprender y a divertirse con juegos y fotografías. Recibió el Premio de la Paz Internacional de la Infancia en 2017 y el Premio al Cambio de Generación de MTV en 2018.
Naomi Wadler, tiene 13 años de edad y su activismo estudiantil comenzó cuando dirigió una manifestación en su escuela primaria en Virginia para conmemorar el aniversario de un mes del tiroteo en la escuela secundaria Marjory Stoneman en Parkland, Florida. La caminata duró 18 minutos: 17 minutos por las y los estudiantes y el maestro que perdieron la vida, y otro minuto por Courtlin Arrrington, el estudiante afroamericano que fue asesinado poco después del tiroteo en su escuela secundaria de Alabama. Su misión es empoderar a las niñas afroamericanas y espera que más personas se unan a su esfuerzo para recordar a Courtlin y a las muchas niñas afroamericanas perdidas por la violencia de las armas.
Natasha Mwansa, con tan solo 18 años de edad es aboga por la salud y el bienestar de las personas jóvenes, especialmente contra el matrimonio infantil en Zambia, haciendo uso de sus funciones como reportera y periodista junior y como supervisora de responsabilidad social en varias organizaciones de salud, reúne y comparte información sobre los derechos de las mujeres y las niñas y hace un seguimiento del progreso de los stakeholders -o partes interesadas-. También fundó la Fundación Natasha Mwansa para promover un mundo en el que las personas más jóvenes sean escuchadas, valoradas y saludables. Gracias a su trabajo, fue seleccionada para formar parte de la Junta Asesora de la Juventud de la Comisión de la Unión Africana y se convirtió en la receptora más joven del Premio a los Líderes en Salud Mundial de la Organización Mundial de la Salud.
Salvador Gómez-Colón, tiene 17 años y fue testigo de la devastación de su comunidad en Puerto Rico al pasar el huracán María en el 2017, se dio cuenta de la difícil situación que se enfrentaban a la perspectiva de no tener energía o electricidad por lo menos durante un año por lo que creó la campaña "Luz y Esperanza para Puerto Rico" que buscaba la distribución de lámparas solares, lavadoras de mano y otros suministros para más de 3.100 familias en la isla. Actualmente continúa apoyando la implementación de sistemas de energía inteligente en Puerto Rico y ha lanzado la iniciativa humanitaria "Luz y Esperanza para las Bahamas". Fue nombrado uno de los 30 adolescentes más influyentes del 2017 por la revista TIME y recibió el Premio Joven Ambiental del Presidente de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos y el Premio Diana por su labor humanitaria social en el 2019.
Así como estos jóvenes hay muchos más talentos juveniles que merecen ser admirados, promovidos e impulsados, todos ellos merecen ser reconocidos por sus labores y por ser agentes de cambio en un mundo en el cual es necesario tomar parte activa para poder mejorar como humanidad.